Ya hace un calor considerable en Madrid, y para aquellos que se queden agosto por aquí.. ¡que se preparen! Por eso hoy recomendamos un método para combatir el calor y que sea más llevadero, al menos durante un rato.
Si hay algo que caracteriza a Italia es sin duda su cultura y su gastronomía. Una riqueza inabarcable que ha hecho que este país haya sabido exportar productos como la pizza y la pasta y convertirlos en patrimonio global — eso sin hablar de los que a nuestro juicio son otros productos gastronómicos a destacar; el café y los helados.
No hay nadie en el mundo que haya sabido hacer un helado con tanta maestría y cariño como los italianos. En eso tenemos que reconocer que son los amos del cotarro. Y en esas estamos desde hace ya casi 70 años con nuestros amigos de La Romana. Una heladería que abrió sus puertas en 1947 en Rimini siguiendo las viejas recetas de su fundador Vito Zucchi, y que en 2013 se traslado a España con una primera heladería en el centro de Madrid, en concreto en el Paseo de la Habana 27.
Pero eso no es todo, aquí se puede disfrutar de una amplia variedad de helados y bollería helada. En la Romana el helado es elaborado diariamente en sus heladerías, utilizando los ingredientes básicos de toda la vida: huevos, azúcar, nata fresca y leche ecológica.
Con motivo de su expansión a la Calle San Bernardo 96, la heladería se amplia con un espacio más cercano a la cafetería/pastelería tradicional, para ofrecer a sus clientes un lugar confortable para degustar cualquiera de sus más de 70 sabores o sus múltiples opciones dulces como tartas, profiteroles, crepes, brioches, etc. Entre ellos se encuentran los sabores elaborados en las temporadas donde la fruta o los frutos secos están en su momento optimo de maduración y consumo. Así mismo, para garantizar que el helado sea fresco, cremoso y sabroso producen solo cantidades mínimas a lo largo del día para que su duración media no supere las tres horas y así poder disfrutar de un helado artesanal recién hecho. Y que a buen seguro, los amantes de los helados sabrán valorar.