Desde vuestra residencia para opositores en Madrid soñáis con un contrato de trabajo indefinido, un sueldo generoso, un horario de 35 horas a la semana y la posibilidad de disfrutar de días libres y permisos retribuidos, así como otros beneficios sociales y de seguridad sanitaria.
Estas idílicas condiciones laborales que os ilusionan, son las mismas que hacen que cada año se presenten miles de personas a las diferentes oposiciones de empleo público. En 2019, en tan solo tres convocatorias (Enseñanza, Administración Pública y Correos), unas 370.000 personas optaron a unas 40.000 plazas, este número se reduce temporalmente debido al COVID-19.
Pero todas las oposiciones no son iguales. Antes de elegir una u otra hay que tener muy claro cuáles son las que mejor se adaptan a la formación, a los intereses y a las capacidades de cada opositor. Las oposiciones se dividen en grupos y subgrupos, dependiendo de la titulación académica exigida.
Por un lado, están las oposiciones de Grupo A que requieren formación universitaria y se dividen en:
Por otra parte, tenemos las oposiciones de Grupo B, para las que resulta imprescindible la titulación de Técnico Superior que se obtiene en la Formación Profesional de Grado Superior.
Y, por último, estarían las oposiciones de Grupo C, que se componen de:
Las oposiciones son una carrera de larga distancia, en la que la constancia, la concentración y la dedicación son fundamentales. Muchos estudiantes deciden instalarse en una residencia para opositores en Madrid, donde disponen de un entorno completamente diseñado para el estudio y pueden centrarse y olvidarse de tareas como la limpieza, la cocina, la compra.
Las residencias para opositores en Madrid de Smart Residences, son la opción ideal para afrontar cualquiera de las numerosas oposiciones que se convocan en la capital, sean del tipo que sean.